BRINDIS POR EL DIA DEL MAESTRO
“Un brindis por el día del Maestro es un brindis por la vida” ya que el
Maestro forja espíritus para la bondad y la lucha por la vida, es decir modelan
almas para un mañana mejor.
Tengo el convencimiento, de que las obras más perfectas, de los imperfectos seres humanos, son aquellas que nacen del corazón. Intentaré definir, que es el Maestro, desde la perspectiva de mí propio corazón “Ser Maestro” es tener la vocación de vivir con pasión, la ciencia y el arte, de esculpir el cuerpo, la mente y el espíritu de los seres humanos, para que sean un todo armónico, hermoso consciente y bueno, para lo mejor y para el bien, insuflando en sus corazones, la inspiración de crecer, hacia la luz y hacia el amor.
Cristo es el mejor maestro del mundo, lo importante es entender las claves que nos presenta en el Evangelio, y la clave es la relación con los demás. El Maestro es el que educa y educar no es otra cosa que ayudar a crecer a los demás.
Quien es maestro, deja huella, trasciende entre sus dirigidos. Se es maestro cuando se orienta, cuando se conduce, cuando con amor se acompaña; cuando se comprende al otro y se ayuda a que este entre en el camino correcto.
Ser maestro es pulir, cincelar y diseñar con paciencia y tolerancia las habilidades de cada alumno. Haciendo con ello una obra de arte universal.
Ser maestro es mucho más que un trabajo es hacer del alma un templo, predicar con el ejemplo, sin bajar nunca los brazos.
Ser maestro es cultivar la virtud, la paciencia, la humildad, es comprender con bondad, la niñez, la juventud.
Ser maestro será llegar un día al final de tu camino y agradecer la alegría que te deparó el destino de haber guiado la vida de tantas pequeñas almas, y abandonarte a la calma, de la tarea cumplida.
¡Sé un buen Maestro¡
Salud.
Tengo el convencimiento, de que las obras más perfectas, de los imperfectos seres humanos, son aquellas que nacen del corazón. Intentaré definir, que es el Maestro, desde la perspectiva de mí propio corazón “Ser Maestro” es tener la vocación de vivir con pasión, la ciencia y el arte, de esculpir el cuerpo, la mente y el espíritu de los seres humanos, para que sean un todo armónico, hermoso consciente y bueno, para lo mejor y para el bien, insuflando en sus corazones, la inspiración de crecer, hacia la luz y hacia el amor.
Cristo es el mejor maestro del mundo, lo importante es entender las claves que nos presenta en el Evangelio, y la clave es la relación con los demás. El Maestro es el que educa y educar no es otra cosa que ayudar a crecer a los demás.
Quien es maestro, deja huella, trasciende entre sus dirigidos. Se es maestro cuando se orienta, cuando se conduce, cuando con amor se acompaña; cuando se comprende al otro y se ayuda a que este entre en el camino correcto.
Ser maestro es pulir, cincelar y diseñar con paciencia y tolerancia las habilidades de cada alumno. Haciendo con ello una obra de arte universal.
Ser maestro es mucho más que un trabajo es hacer del alma un templo, predicar con el ejemplo, sin bajar nunca los brazos.
Ser maestro es cultivar la virtud, la paciencia, la humildad, es comprender con bondad, la niñez, la juventud.
Ser maestro será llegar un día al final de tu camino y agradecer la alegría que te deparó el destino de haber guiado la vida de tantas pequeñas almas, y abandonarte a la calma, de la tarea cumplida.
¡Sé un buen Maestro¡
Salud.
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